Las personas que tienen más de veinte o treinta años tuvieron una infancia muy diferente de aquella que viven los niños de hoy.
Era muy usual a los padres dejar sus niños jugaren en las calles con sus vecinos e conocidos. Eso era posible porque las personas que allí vivían, cerca uno de los otros, se conocían, y muchas veces mantenían incluso lazos familiares.
La verdad es que las personas vivían casi toda la vida en un mismo lugar, con sus hijos, nietos y algunas familias de conocidos. Las cosas cambiaban lentamente y poco se sabia del mundo, pero mucho se sabia de sus vecinos y de su barrio. Tal realidad aún puede ser vista en muchos barrios de pequeñas ciudades, normalmente en los pueblos más tradicionales, que se esfuerzan para mantener las tradiciones y la cultura de sus abuelos.
Sin embargo, en las grandes metrópolis la vida es diferente, especialmente para los niños que viven en los grandes edificios, los condominios residenciales o cerrados. Allí no hay conocidos para jugar o hacer bromas, las calles son para los coches y sus padres tienen mucho miedo de lo que puede ocurrir fuera de casa.
Los niños casi no salen de casa y el contacto con el mundo es la televisión o la internet. Sus pocos amigos son hechos en la escuela, donde estudian otros niños que también no pueden salir a la calle. Esta nueva generación, especialmente los ricos, pasan la vida de un estacionamiento para otro, del shopping, del clube, del edificio o de la escuela de inglés, siempre en un coche, nunca caminando. El mundo real solo aparece en los vidrios de los coches cuando están detenidos en el faro.
Así, estos niños y jóvenes son cada vez más individualizados, hacen y piensan las cosas para si mismos, sin preocupaciones con las consecuencias o la reacción de otras personas, del mundo.
De jóvenes individualistas hacia adultos solitarios no imagino que sea un camino muy difícil. Si las personas tienen miedo, o no dan mucha importancia para lo que no conocen, como pueden crear buenas amistades? Como se puede conocer alguien interesante si tenemos miedo de salir de casa?
Creo que esa no sea la realidad de todos, pues los niños y jóvenes de familias más populares, que estudian en escuelas del gobierno, tienen un mejor conocimiento del mundo real, de las diferencias. Pero, en este caso, los problemas son otros, también muy preocupantes.
Imagino también que esa nueva realidad no sea necesariamente mejor o peor que la que conocemos cuando chicos. Las personas hoy tienen grand libertad para hacer lo que desean, estudiar lo que les gusta, escoger cuando y si quieren tener una familia, y las mujeres no dependen más de sus maridos. Tal vez la cuestión sea exactamente esa, o sea, las personas hoy tienen mucho más libertad, pero, no saben mucho bien como vivir con ella.